Durante uno de tus relajantes paseos por la piscina observas que ésta pierde agua, es posible que pienses que es debido a la evaporación, al agua desplazada por las salpicaduras de tus hijos y amigos cuando se bañan, o incluso por los lavados del filtro. Todo esto sin duda hace que haya que reponer agua, pero a veces hay otros motivos que pueden provocar que la piscina pierda agua. Para comprobar esto existen unas sencillas pruebas que puedes hacer para determinar si hay algún tipo de fuga en tu piscina y que no afecte al mantenimiento de piscinas. Pero lo primero es lo primero, ¿Existen diferentes tipos de fugas?

Tipos de pérdidas

  • Fugas Hidráulicas: es el tipo de fuga procedente del sistema de circulación o de filtrado de la piscina. Dicho de otra manera, consiste en aquellas fugas que proceden de aquellas tuberías ajenas al vaso de la piscina.
  • Fugas Estructurales: son las más difíciles de detectar, y proceden del vaso de la piscina, es decir, del lugar donde se almacena el agua para su disfrute. Es aquí donde se pueden producir daños de gran repercusión económica, y no sólo por la factura del agua, sino porque la fuga pueda ir a más.

Debido a esto necesitamos conocer lo antes posible si existe algún tipo de fuga que pueda interferir en el correcto mantenimiento de piscinas. Ahora te explicaremos cómo detectarlas:

¿Cómo detectar si existe una pérdida?

Los equipos profesionales como Piscinas Iguazú, disponemos de maquinaria capaz de detectar si existe algún tipo de fuga para ofrecer el mejor mantenimiento de piscinas. ¡Pero esto en principio a ti no te ayuda! ¿Por qué digo esto? Por el simple hecho de que si no eres consciente de que tienes una fuga, va a ser imposible que la repares o te pongas en contacto con profesionales para hacer el mantenimiento de piscinas. Dada esta situación, te damos a conocer una serie de sencillos trucos para que puedas ver si tienes una fuga.

  • Factura del Agua: si has notado un incremento significativo en la factura, quizá se deba a que tienes una fuga, ya sea en la piscina o en cualquier parte del canal de tuberías que tengas en tu casa.
  • Marca del Agua: en una de las paredes de su piscina, marca el nivel de agua que haya en ese momento. Pasadas 24 horas, vuelve a ver su señal. ¿Ha perdido más de 0,5 centímetros? Seguramente se deba a una fuga.
  • La prueba del Cubo: coloca un cubo relleno con unos 20 litros de agua dentro de la piscina en el primer o segundo escalón de tu escalera romana, si no tienes escalera romana en el peldaño de la escalera de acceso (de aluminio), teniendo en cuenta que es importante que el cubo no se sumerja. A continuación haz dos marcas, una en el interior del cubo que refleje el nivel de agua dentro del envase y otra en el exterior correspondiente al nivel de agua de la piscina. Pasadas 24 horas, ambos niveles deberían haber descendido en la misma proporción, si hay una diferencia importante entre ambas marcas, nos encontramos ante una fuga. Es importante señalar que si llueve la prueba carece de valor.

¿Y si también quiero detectar dónde está la fuga?

  1. Puedes realizar la prueba del cubo de dos formas diferentes: con el motor encendido o apagado. De este modo la piscina nos puede ´´cantar´´ si el problema está en la estructura o en alguna tubería, aunque para determinar esto.
  2. La Prueba del Tinte: en el mercado existen tintes, que pueden orientarte al lugar donde está está la fuga, práctico si la avería está en el suelo o paredes del vaso ya que el tinte se dirige hacia la brecha que haya causado la fuga.

Por desgracia, no todas las averías son detectables con esta clase de técnicas, sino que son los equipos profesionales, con herramientas especializadas, los únicos capaces de detectarlas de una forma precisa además de ejecutar posteriormente la reparación de piscinas adecuada a cada caso.

¿Crees que tienes algún tipo de fuga en tu piscina y buscas a profesionales en mantenimiento de piscinas ¡Contacta con Piscinas Iguazú!

Buscaremos soluciones para tus problemas, pídenos presupuesto sin compromiso!