No seríamos capaces de poner fecha al momento en que el hombre empieza a crear balsas de agua para el disfrute de bañistas y paseantes. Hasta hace unos años, tener una piscina en casa era un lujazo que no todo el mundo se podía permitir. Mira los vecinos, que se van a su parcela con sus piscinas desmontables, oíamos con cierto recelo cuando llegaba el veranito -salvo cuando nos invitaban, claro-.

Ahora, el que tiene una casa de campo y un pequeño espacio en el jardín, puede tener su propia zona de recreo acuático gracias a las piscinas desmontables, una forma mucho más barata de disfrutar del recreo en el agua. Si miras en internet, comprobarás muchísima gente busca para su casa uno de estos contenedores de agua que no precisan de obra alguna para su instalación. Además, suelen montarse sin mucho trabajo, no hace falta ser un genio, y requieren de poco mantenimiento.
La variedad es inmensa, en el mercado actual existe una gran variedad de modelos, revestimientos, medidas, diferentes decoraciones y formas que permiten al cliente encontrar siempre la piscina que más se adapta a sus necesidades.

En los 80 las piscinas desmontables irrumpieron en el mercado con fuerza y cuenta con una aceptación cada vez mayor entre los locos del agua. Se ha llegado a una especialización tan alta que apenas existen diferencias con las piscinas tradicionales. Están diseñadas para montarlas y desmontarlas y cuentan con sus propios equipos de filtración. Pero su ventaja principal es el precio, siempre más económico que hacer un agujero en el jardín, lo que supone una obra de características importantes.

Así que ya puedes ir cogiendo el metro, que los niños no paran se cansan de pedir piscina en verano. ¿Qué necesitas para tener una? pues lo primero un espacio vacío donde colocarla. Que el suelo donde se apoye esté nivelado y coger bien las medidas de lo que puedes tener en casa.

Ventajas de las piscinas desmontables

  • Disponen de una gran variedad de medidas, materiales y modelos, así como diferentes decoraciones y acabados.
  • Están diseñadas para garantizar una gran seguridad y una usabilidad total.
  • Existen múltiples opciones de revestimiento resistentes a la corrosión (acero, aluminio, madera, vinilos adhesivos, chapa pigmentada….)
  • El mantenimiento es sencillo.
  • Su montaje es rápido y limpio.
  • Su presupuesto está muy por debajo a una piscina de obra.
  • Son ideales para espacios reducidos.
  • Este tipo de piscinas cuentan con revestimientos impermeables de gran resistencia y que en algunos casos imitan a otros materiales naturales.

niña piscina desmontable

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