Llega el invierno, tiempo de llevar botas, de elegir bufanda a juego con el abrigo, que si las castañas o un buen cocido. Es momento de disfrutar de la nieve, de una sobremesa junto al fuego, de un baño en agua caliente… Pero bueno, en invierno no te puedes olvidar de tu piscina!!!

Que sí, que no te vamos a quitar razón, en invierno no tenemos muchas ganas de baños, salvo en la ducha. Pero esto no significa que, si tenemos una piscina, la dejemos ahí olvidada hasta el verano, porque luego pasa lo que pasa.

Si eres el afortunado propietario de una piscina, el invierno es la época ideal para todo lo que decíamos en la entrada de este artículo, pero también es el momento de preocuparnos por esos detalles que te harán la vida más fácil al llegar el verano.

Si no quieres tener un quebradero de cabeza, sobresaltos o una piscina que más parece un foso de skate en el Bronx, presta atención a estas cositas que debes tener en cuenta para tener tu instalación siempre perfecta.

Cosas a tener en cuenta en invierno

En invierno hay algunas cosas en las que hay que pensar si tienes una piscina. Realmente, es el momento ideal para planificar todo tipo de obra o reformas que tengas ahí en mente y que luego no haces cuando llega el verano.

No descuides el momento. El mundo de las piscinas, como sabes, es totalmente estacional, por eso, durante el invierno es muy fácil conseguir interesantes ofertas, descuentos y oportunidades, ya sea en productos para el agua, como en la instalación de equipos.
lista de cambios piscina

Pero es que siempre pasa lo mismo, a medida que se acerca el verano todo el mundo se acuerda de las cosas que debe hacer en su piscina y es entonces cuando, por supuesto, los precios suben y las buenas empresas estarán saturadas de trabajo. Es exactamente lo mismo que ocurre en la industria de los aires acondicionados, siempre es más caro instalar un equipo en verano que en invierno. Y lo sabes.

Siéntate un rato y coge papel y bolígrafo. Hazte una pequeña planificación empleando un checklist (una lista de cositas) que te permita identificar aquellos elementos en mal estado o que sencillamente lleves tiempo pensando en cambiar porque quieres darte un ‘caprichito’.

Elementos en tu lista de cambios para tu piscina

Pues hay muchas cosas que debes revisar ahora y que sólo tú sabes en que condiciones están. Procura que la lista sea detallada, lo cual te facilitará las cosas. Algunos de estos elementos son los de la sala de máquinas: cómo está el motor?? el equipo desinfectante? qué me dices de tu cuadro eléctrico?? las tuberías?? y las válvulas y las llaves??

Luego están los elementos externos, los de la zona que rodea a la piscina y el propio vaso. Analiza a fondo el estado de las duchas, las escaleras de acceso, las rejillas del rebosadero -si lo tiene-, los skimmer, el estado del solado, de la albardilla.

Sólo tú sabes cómo está el revestimiento de la piscina, ya sea de gresite, lámina armada, poliéster o esté pintada. Qué tal están los focos?? y el resto de elementos empotrados?? – llamamos así a aquellos componentes que son aspiraciones o impulsores de agua, es decir, a las tomas en general de color blanco como skimmers, sumidero de fondo, toma de limpiafondos y jets impulsores.

Asimismo si tienes una lona de invierno, conviene que te fijes, no sólo en el estado de la lona, sino en las gomas y en que los anclajes estén en buen estado.

Revisa los elementos de limpieza:  procura que el recogehojas no tenga agujeros en la bolsa y el cepillo tenga las cerdas en buen estado. En cuanto al limpiafondos es importante prestar atención a la barredera, manguera, pértiga y sus conexiones.

Planificación, esa es la clave

Dependiendo de cuál sea el problema que tenga la piscina, el tipo de instalación que se vaya a acometer y el grado de complejidad de la misma, la obra puede alargarse más de lo deseado y nos puede pillar el toro. Conviene, por tanto, realizar una buena planificación para evitar sorpresas. Date tiempo, el invierno es el momento!

Nuestro consejo: es importante solicitar varios presupuestos, no te quedes con el primero que te den. Es capital tomarse un tiempo de reflexión a la hora de elegir la empresa que más se adecue a lo que buscas y que más confianza te dé.

Te recomendamos que la empresa elegida sea profesional y con trayectoria demostrable. Creemos que es mejor valorar todos los presupuestos desde ópticas distintas a dejarse llevar sólo por aquellos precios más baratos. La mayoría de las veces, en esos casos, existe una «trampa» que pagaremos en el futuro.