Filtración de agua de piscina
La filtración es la base del tratamiento del agua de la piscina, es el verdadero corazón de una piscina.
Filtro de Alto Rendimiento (ya sean filtros verticales o de cartucho), bomba o motor, carga filtrante AFM, sistemas de aspiración eficientes, buen dimensionamiento del circuito hidráulico, cavitador para tratar el agua con coagulantes y floculantes y potenciar la filtración.
Aplicamos la lógica y el sentido común para instalar el mejor sistema de filtración a cada piscina en función de sus necesidades y todo con un único propósito: conseguir el mejor resultado del agua empleando la menor cantidad posible de producto químico, consumiendo la menor energía y la menor cantidad de agua posible.
La bomba o motor es uno de los elementos indispensables que el agua de una piscina pueda filtrar correctamente. Es el protagonista de mover el agua. Los motores clásicos cuando están encendidos mueven el agua a una misma velocidad.
Las bombas de velocidad variable nacen con el objetivo de ajustarse a las diferentes necesidades de una piscina y del propio usuario, ya que no siempre necesita filtrar a la misma velocidad. Aumentando y reduciendo la velociadad conseguimos no sólo modificar la velocidad y el caudal del agua, y tener una mejor calidad del mismo sino también gestionaremos mejor los consumos energéticos, consiguiendo un menor gasto eléctrico.
Ventajas de las bombas de velocidad variable
Ahorro luz
Se reducen los consumos de energía. Gracias al uso de la velocidad variable y de la programación horaria se consiguen notables ahorros energéticos.
Menos ruido
Se mejora el confort de este equipamiento al reducir el ruido cuando está en funcionamiento.
Mejor calidad
Al adaptar la velocidad a las necesidades de cada momento y función se consigue una calidad del agua superior
Equipo Sostenible
Cómo adquirir una bomba
La elección de la bomba se hace en función del caudal necesario (en m3/h) en base a las características constructivas de la piscina. Se calcula teniendo en cuenta que el agua será renovada como mínimo 3 veces el volumen de la piscina cada día. Además debe estar en relación al filtro instalado. Como decimos, existen dos tipos de bombas para piscinas. Las bombas clásicas y bombas de velocidad variable. Las segundas, suponen una mayor inversión, pero a la larga se amortizan. La idea principal de una bomba de velocidad variable es que al filtrar muchas horas a velocidad lenta, consumen mucho menos y además se obtiene una gran eficiencia en la filtración. Las velocidades rápidas se emplean puntualmente.